Cómo potenciar tus "puntos fuertes"


Hay personas que tienen una imagen distorsionada de sí mismas. Su inseguridad y pesismismo les hace magnificar sus defectos e ignorar sus virtudes. Se entra así en una situación de baja autestima de la que no resulta fácil salir.
La solución está en intentar hacer lo contario, es decir, en lugar de obsesionarse con nuestros defectos, intentaremos centrarnos más en nuestras virtudes y capacidades.
No se trata tanto de no tener defectos, todos los tenemos, sino de aceptarlos y relativizar su importancia. Obsesionarnos con ellos nos limitará como persona.
Date una segunda oportunidad y sé más condescendiente contigo mismo. Intenta mirarte con otros ojos. Si no sabes cómo hacerlo, te puede ayudar anotar en un papel todas tus cualidades. Revisa esta lista con frecuencia y piensa en la mejor manera de potenciar tus puntos fuertes.
Para recuperar tu confianza, será necesario trabajar a fondo y reconstruir tu propio "YO". No intentes conseguirlo de un día para otro. Se trata de un largo camino que debemos hacer sin prisas y con calma.
Los primeros éxitos te ayudarán a tener una mayor confianza y te animarán a proseguir en tu transformación. 

Los "LAT": vivir juntos, pero separados

Se trata de  una nueva forma de relacionarse. Son parejas muy bien avenidas pero que no desean compartir techo. Permanecen cada uno en su propia casa y, a pesar de formar una unión 100% consolidada, no se plantean iniciar una vida en común.
esta nueva moda nos llega, como muchas otras, de los Estados Unidos, pero está empezando a implantarse poco a poco en nuestro país. Se les llama LAT (del inglés: "Living Apart Together", es decir, vivir juntos y separados) y cada vez tiene más adeptos.
Suelen ser parejas de entre 30 y 50 años, con hijos propios o sin intención de tenerlos. Cada miembro tiene su propia casa y no quiere perder ni su estilo de vida ni su independencia. Mantienen una relación "de novios" para evitar que la convivencia acabe con la magia que había en los primeros encuentros.
Para que este tipo de relación funcione, es necesario que ambos miembros estén de acuerdo con las condiciones. Establecer de antemano las normas, evitará muchos conflictos y malentendidos.
A pesar de ser una opción tan legítima como cualquier otra, cabría preguntarse si el hecho de rechazar la convivencia con la otra persona amada, es consecuencias de una inseguridad provocada por fracasos anteriores. 

Ansiedad: cómo hacerle frente

Palpitaciones, sensaciones de ahogo, náuseas, facilidad para llorar...¿crees que podrías estar camino de sufrir un trastorno de ansiedad? No sufras más. Todavía estás a tiempo de controlar este problema.
Cuando la ansiedad ya se ha declarado, es preciso terapia psicológica y medicación para combatirla, pero, si todavía no has llegado a este extremo, hay una serie de pautas que pueden hacerte pasar esos momentos más fáciles.

  • Busca la compañía de personas positivas. No te guardes el sufrimiento para ti. El apoyo emocional que pueden proporcionarte tu familia y amigos, es el mejor ansiolítico que existe.
  • Descarga la tensión nerviosa realizando actividades que te gusten. El deporte y los ejercicios de relajación o meditación, son especialmente beneficiosos en estas situaciones. Aficiones como la pintura, la música, las manualidades,... te ayudarán a encontrar algo de serenidad.
  • ¿Tienes la impresión de que la vida se ha convertido en un caos? Ponle un poco de orden reestructurando tus horarios, repasando tu lista de prioridades, eliminar todo aquello que no sea necesario y que te produce agobio. Ordena tu casa, tu mesa de trabajo, cambia de sitio tus muebles y desecha lo supérfluo.  

La Felicidad depende de ti

"Tengo un gran poder para que mi vida sea triste o alegre", decía Goethe, el gran escritor alemán. Según los psicólogos, nuestra felicidad depende, en un 10% de las circunstancias externas (salud, dinero, amor, éxito,...) y el resto, de nuestra actitud ante la vida.
A ser feliz, por lo tanto, se aprende. El primer paso es tomar conciencia del poder que tienen nuestras emociones. Si empezamos el día malhumorados, es difícil que podamos remontarlo. Por el contrario, si nos levantamos con la sonrisa en los labios, tenemos muchas posibilidades de pasar un buen día.
No hay que olvidar, sin embargo, que en el transcurso de la vida, nos vamos a encontrar con situaciones adversas, que pondrán a prueba nuestra fortaleza. En estos casos, es importante ver la cosas con objetividad, intentar solucionar el problema de la forma más racional posible y siempre con una actitud positiva.
No malgastes tu tiempo y energía en obsesionarte con los aspectos negativos de la vida. Si te encallas en esta actitud, no podrás disfrutar de las muchas oportunidades que te esperan para ser feliz.
Por último, no focalices tu atención en errores del pasado y mira hacia delante con optimismo. Sólo tú tienes la llave de tu futuro.